martes, 24 de julio de 2012


No sé por qué decidirme... Si por ser ganadores en el concurso de quien es el país más pobre o por el que tiene más miedo...
Me escama pensar que hemos llegado al punto en que a causa de este maldito estado de excepción (que no es otra cosa, por excepcional) nos tengamos que ver en tesituras de lo más bobas y sin sentido, o sintiéndolo mucho. Nos obligan a sopesar la desgracia, la que tenemos y la que se nos avecina.
No quiero tener que hacer una lista, ni preguntar para una estadística personal... ¿qué es lo primordial?... es la salud, la educación, el trabajo, la cultura... no quiero, que no!
Sé que con la carencia de ciertas cosas no puedo vivir... moriré si no como, si no bebo, si enfermo... nunca nadie murió a la misma velocidad por no tener educación... claro que también quiero una casa decente... y un trabajo normal... y poder llegar al sábado y que me apetezca ver una peli en la tele o visitar un museo...
Me temo que esta gente nos hace enfrentarnos, no tanto con el tema de si ir al museo o al médico, pero sí con la historia de que entre nosotros, unos contra otros, nos peleemos para ver quien tiene tal o cual derecho y que parezca que lo conseguido hasta ahora es solo una falacia, una ilusión que no nos merecíamos.
Lo mismo hay gente que anda rezando para que volvamos al redil, para que tengamos claro quién está arriba y quienes abajo y la vida solo sea un pedir a dios o a la fortuna la posibilidad de mejora.
Qué no! qué no vamos a llegar a esto! No lo haremos porque podemos ser todo lo pobres que quieran, pero hasta el día de hoy supimos aprovechar lo que llegó, ya nadie es un bobo que se deja manejar... que lo sepan, solo es cuestión de miedo.
La Pasionaria dijo aquello de: "Más vale morir de pies, que vivir de rodillas"... lo lamento querida pero cuando un hijo no tiene que comer... Y no es tan malo, estás más cerca de poder agarrarlos por donde más les duele. Venga! a estirar manos y estrujar... se lo merecen!
Sigo en mis trece... Necesitamos un borrón y cuenta nueva para poder seguir por otro camino.

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