Excusas para librarnos del ingreso en un sanatorio. No somos maníacos, nos obligan.

Ya pasan de las doce y ni he dicho "Buenos días" ni veo nada que poner que merezca la pena... he ido a otras fuentes y se ve que llego tarde, que para tener chispa informativa hay que madrugar o lo que es lo mismo, levantarse temprano. A estas horas no te ayuda nadie... Y es que anoche encontré una entrada que definía una patología y mientras la leía iba viendo qué, o ellos exageran, o este país está ya condenado a una buena enfermedad mental. Así que me puse a ver los puntos y reseñar lo que veo que serían excusas para librarnos del ingreso en el sanatorio.

•--"Excitación, exaltación, sentidas como «presiones internas»"

Tienes momentos en los que te excitas, te exaltas con mucha facilidad?

¿Sí? No te asustes, esto nos pasa a la mayoría de los españoles. Tal y como

están las cosas, se excita el viejo que ve como su pensión mengua o peligra:

se excita el joven que ve como los valores que aplaudíamos hace nada quedan

escondidos y no tendrán las oportunidades a la puerta de casa. Lo hacen los

obreros que ya no trabajan y si lo hacen, tiemblan cuando suena su nombre,

no sea que se quede sin el jornal, por pequeño que sea. Nos exaltamos y

acudimos al grito, al grupo, a la exhortación de la malicia en los centros

sociales. Las sientes dentro, como si tu estómago no pueda dejar de

descargar esas corrientes que te amargan. Hasta el rico se excita viendo

como la plebe se revuelve y desde dentro le salen juramentos, lamentos y

oraciones.

•--"Humor elevado: clásicamente eufórico, aunque también destacan

irritabilidad, mayor reactividad y tendencia a ponerse fácilmente colérico."

Seguramente lo que rodea no está nada claro. Pensabas que más bajo no se

podía caer, y te diste cuenta de que sí, aun queda mucho para desear que un

bombazo termine con todo.

Te tiraste al deporte, que siempre te gustó y de alguna manera tapa

huecos, los rellena con cremas de euforia cuando ganan, broncas terribles

cuando ves un ataque y un fuerte sentimiento de cólera cuando pierden. El

deporte es tu ley y es posible que el fútbol sea tu leche.

•--"Actividad sin reposo, agitación improductiva. Se empiezan varias cosas que

no son acabadas."

No puedes parar, ahora en el trabajo ya no se andan con chiquitas, sientes

que si miran y no te ven sudar, es posible que seas el próximo en ir a la

calle. No paras. Si no trabajas, tampoco lo haces, tienes el día ocupado.

Miras si hay alguna oferta, mandas otros cincuenta currículos y rectificas

con una nueva mentira el que hiciste. Los llevas en mano, los mandas por

email, los certificas. Corres de una cola a otra, y ni en estas descansas.

Charlas, te enfadas, vociferas, controlas, descontrolas, y pierdes… siempre

pierdes las ganas. Empezaste una idea que no tiene futuro, la dejas.

Empiezas y no acabas, porque no ves ni el camino, ni la meta, ni el tiempo

que te queda.

•--"Disminución del pudor, pérdida de inhibición, pudiendo llegar a actitudes

de seducción y contactos sexuales excesivos, teniendo en cuenta que la

persona en estado normal no habría deseado tener ese tipo de comportamiento."

Duermes poco y ves mucha televisión? Duermes normal pero tu dedo manda al

cursor del ratón que abra webs donde hay gente que ni es feliz, ni triste,

el mercado del sexo gratuito y popular. El estrés no te deja relajarte,

empiezas a olvidar qué era lo que los anuncios te decían que tenias que

hacer para la conquista. Ni falta que hace el dinero para esto. Lanzas el

anzuelo a todas horas y acabas mirando una pantalla donde nadie te pide

explicaciones. Antes cuando todo iba bien la cosa era regular, ahora tu

presidente del gobierno te dice que no lo mereces y las ministras te ponen

menos que un zapato viejo. No te avergüences.

•--"Aceleración del pensamiento: nuevos y numerosos pensamientos pasan por la

mente de la persona sin que ésta pueda detenerlos."

Cuántas ideas positivas aparecen delante de ti. Llegan a borbotones, cosas

que se puede hacer, modos de ganarte la vida, ideas para crecer, viajar,

educar, sostener y rebelarte… hay días en que es tanta la fuerza que no

puedes parar, a no ser que alguien te invite a una cerveza y puedas hablar

de deportes.

•--"Dificultad para concentrarse, fácil distracción."

Ellos lo llaman dificultad, tú, entusiasmo desmedido. Ellos creen que no te

centras, tú, estás aprendiendo a valorar otras cosas. No te comprenden y lo

que es peor, ni siquiera lo intentan, para qué te vas a molestar…

•--"Trastornos del curso del pensamiento (digresiones múltiples), pérdida del

hilo de la conversación."

Estás más que harto de hablar siempre de lo mismo. Que si la crisis, la

hipoteca, el gobierno, el paro, la ecología… hay demasiadas cosas que ver,

internet no para y la información te embota. Unos dicen sí, otros no, unos

que si paz, otros pelea… y de medias unas flores con frases de autoayuda que

solo sirven para despistar. Y te estás quedando atrás, ya no alternas como

antes, no vas al cine, no compras libros, no sabes que los del Corte Inglés

han cambiado la sección de novedades y por esto, no hay manera de mantener

una conversación como dios manda.

•--"Fuga de ideas: dificultad para seguir el discurso de una persona que sufre

de manía, ésta suele olvidar el tema inicial."

Cuántas veces te hablan como si no les escuchases. Elevan la voz en sus

razonamientos y sonríes, no quieres ser descortés. Pero… por qué? Se empeñan

en contarte cosas que ya no te interesan. Ves que la conversación se va

convirtiendo en un riachuelo que no ha de parar. Ahora entrar en un lugar, o

dar un simple “buenos días” da pie a que te cuenten que de buenos no tienen

nada. Que ha subido el pan, que no hay trabajo, que tal o cual ladrón no

tendrá pena, qué desde el rey al mendigo sufren el vivir en un mundo que

parece se pone de acuerdo para molestarte. Si al menos tuviesen un partido

de fútbol todos los días… estarías atento, eso, sí que motiva.

•--"Logorrea: habla abundante, acelerada e imparable, siendo esto el reflejo

de la aceleración del pensamiento."

Como no hay trabajo, o si lo hay cada día es menos gratificante, todos se

empeñan en darnos su parecer, todos tienen el remedio y con esto la

solución, pero tú sigues con un futuro incierto. Todos hablan y nadie

escucha, lo mejor ante esto es no dejar de hablar. Te desbordas a la que

puedes, con un aire de proclama, sin importar a la concurrencia lo que

digas, que a veces, unas pocas veces parece que te escuchen porque sonríen.

Esa sonrisa del tonto…

•--"Excesiva confianza en sí mismo"

Abres el ordenador y es impepinable que algún amigo te mande un mensaje de

ánimo, de control mental ante el desgraciado rumbo que tiene el país. Te

pasas el día copiando y pegando ideas que de tanto verlas las haces tuyas.

Porque a ti no se te ocurrieron, que lo hubieses hecho, pero un listo se

adelantó, y bien podían ser de tu propiedad, además si te llegan las buenas

ideas es porque las atraes.

Tanto te dijeron no, que se convirtió en un sí. Y sin duda este año tu

equipo ha de ganar la liga, aunque pierda. O como los políticos en las

elecciones, que si ganaron, lo merecían y si no, si perdieron, ganaron de

una manera real por la excusa de los porcentajes. Por qué no has de hacer lo mismo? Y ese compañero,

compañera, que tienes, que hasta cuando te recrimina te anima…

•--"Disminución de la necesidad de dormir sin que la persona sienta la fatiga

asociada a esa falta de reposo. Esta falta de sueño es a menudo uno de los

primeros signos de un episodio maníaco."

Dormir es soñar y desde hace tiempo que lo haces hasta despierto. Sueñas

que la malicia se acaba, que los que no pagan, paguen; sueñas con

sobrevivir y de paso, si no mejoras económicamente, lo haces en inteligencia,

qué ahora te pasas las noches mezclando sexo con chistes o frases ingeniosas

en contra de los desalmados gobernantes. A veces no duermes porque te quedas

al fresco mirando el cielo esperando que baje un extraterrestre y arregle el

mundo, ya que has llegado a la conclusión de que tú no lo vas a conseguir; no

porque no puedas, más bien, porque no te dejan.

•--"Sentimiento altruista: ganas de ayudar a los demás, hiperempatía."

Estás medio bien o medio mal y esto te da empuje para ayudar a otros que

están mucho peor. Quisieras ser el salvador y entre trabajo o cola del Inem

te vas a las asambleas, a las manifestaciones y ayudas en el reparto de

comida. Has empezado a recoger cosas de la basuras, por ayudar a los

barrenderos, no por necesidad. Lo notas en las manifestaciones, tú eres

todos y sientes que no estás solo, ellos están necesitados de ti.

•--"Hipersensibilidad afectiva y sensorial."

A veces una mirada de afecto te envuelve y te deja triste. No te lo

esperas, no sabes qué cara poner. Lo mismo que cuando llega un aviso de un

posible trabajo.

Sientes que ese detalle que ha tenido el jefe es infinito,

hoy te hizo un guiño cuando te quedaste dos horas más sin cobrar. Seguro te

entiende y casi estás por apostar que de estar solos te abrazaría… hasta

estrangularte.

•--"Labilidad emocional: pasar de la risa a las lágrimas con mucha facilidad."

Esto lo has tenido siempre. Puedes entrar riendo al bar y salir llorando,

depende de las copas que te tomes. Casi es amor. Ahora que las cosas

materiales ya no te llegan, te fijas en los pequeños detalles y esas

personas que antes despreciabas, ahora se van a los portales a gritar

justicia contigo. Ríes con ellos si se consigue y lloras cuando el esfuerzo

ha sido en vano. La vida empieza a parecerse a un partido, es como estar en

la cancha o en el campo; a veces llevas dorsal, otras vas de negro.

•--"Negligencias en la alimentación o en la higiene."

A quien le importa si hueles bien o mal, a nadie. No comes como antes, ya

no se puede uno permitir ni los pequeños vicios, ahora es grande la comilona

en un comedor social. Y todos sabemos que los que recogen comida de la

caridad, la guardan en casa para mirarla en las noches que se ha caído el wifi.

Es gracioso, hay días en que comes bien y otros en los que casi ni un café

puedes hacerte. Todos están igual, el rico y el pobre. Aquel porque todo le

sienta mal y este porque el mal le sienta bien y casi no necesita comer. Lo

mismo con el cuento ese de ducharse todos los días, ya lo dijo el ministro,

solo hace falta agua fría para espabilar y tu, como todos los pobres, no lo

necesitas, el hambre también espabila. Si uno va bien rollizo, limpio y con

la ropa brillosa, los de la caridad se mosquean. No se puede ser pobre

decente, para todo hay que tener cabeza.

Como se puede ver, cualquiera de los puntos que dicen a los psicólogos que

somos personas enfermas, con trastornos, se solventan con una pequeña

descripción de cómo anda la sociedad. No me he inventado nada, la gente, los

que conformamos este lugar y somos ciudadanos, vivimos al día, sujetos a la

novedad que nos llega desde el gobierno. Un día eres normal y al siguiente

estás en la calle. Una noche tienes casa y a la mañana no puedes pagar ni el

alquiler. Pero esto no les importa, ellos seguirán amasando fortunas,

sintiendo que pertenecen a capas superiores donde la desgracia solo les

llega a esos que van contentos a votar y sienten que la democracia es la

mejor opción para suponer que participan. Nos tratan como al ganado que no

tiene necesidad alguna del sentimiento, vivirá según el pastor tenga a bien.

Yo creo que ya es hora de cortar con esto. No podemos permitir que una

situación tan miserable nos deje en la cuerda floja del ser o no ser

enfermos mentales.