Estaba pensando que me gustaría ser... estoy en duda, si un
8 o un bonito 0... la verdad es que no lo tengo claro...
Ambos son pares... qué sí, que ahora el cero de toda la
vida, ese que los viejos piensan que no tiene valor, lo tiene y es par.
A la par, por paridad, por par-tes, por par-tida doble,
por... y es que la partícula par es exquisita, casi honrada, diría yo, que sabe
cómo repartir nada y si no, que se lo pregunten al rey ese que quería partir un
nano por la mitad. De haber cero niño, no se hubiese dado el caso; de haber un
niño y cero madres, tampoco y es más... no tendría que haber ni rey... y este
cuento sería uno de esos abstractos que como un cero cualquiera nos quieren
imponer.
Si hay algo que me mosquea mucho son las fábulas, no me
gustan nada. Siempre pierde alguien, uno es más listo que otro, uno es astuto y
otro se muere de frío o se lo comen las manías... las fábulas son como las
parábolas de los religiosos y las afirmaciones de los políticos, están hechas
para confundir, para inculcar ideas que interesan a unos pocos. Ayer fue su
muertocumpleaños (Felix María Samaniego) y lo releía mientras pensaba en la de veces que usamos de la jodida
hormiga para machacar a los demás. Qué ese "demás" era un músico que
alegraba la vida. El muy tonto no cobraba por ello y claro, luego pasa lo que
pasa, que tiene cero en la despensa y se muere de asco. La otra, la pedante
hormiga no para de currar y de almacenar... si es que la veo gobernador animal
de algo... esa, seguro que es impar.
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